Bolivia vive desde hace más de una semana importantes manifestaciones por el nuevo aplazamiento de las elecciones, con bloqueos de caminos que asfixian a hospitales y productores.
Esta situación ha derivado en que vehículos de transporte pesado queden varados en las carreteras, con desabastecimiento de alimentos o su aumento de precio, y que insumos médicos de vital importancia para los pacientes críticos del covid-19, como el oxígeno medicinal, no puedan llegar a hospitales, que se declararon en emergencia.