Una buena noticia en medio de la terrible sequía que golpea al Chaco. Después de varias pruebas fallidas, el sábado a la noche comenzó a ingresar sin interrupciones agua proveniente del río Paraguay a los reservorios de Loma Plata y sus conexiones en Filadelfia y Neuland. La poca lluvia también permitió acelerar las obras del acueducto, que llevan años de retraso.
